Espero que os haya gustado, os diré que si tenéis ocasión de ir a China, nunca os váis a arrepentir, mi marido no quería ir y ya me está diciendo que cuando volvemos. Hasta el próximo que será Egipto.

La de la izquierda con chaquetón rojo es Lina, la guía de China, un encanto de mujer.

&&&&&&&&&&&& FIN &&&&&&&&&&&&

Día 17 de Abril

Sin desayunar hacia las 5,30 h de la madrugada salimos rumbo al Aeropuerto Pekín-París, hicimos un vuelo bastante tranquilo, en lo que respecta a turbulencias, llegamos a París con retraso y no pudimos enlazar con el vuelo que nos llevaría a Madrid, por lo que tuvimos que esperar en el Aeropuerto durante cuatro horas, hasta la siguiente salida para Madrid. Se nos hizo muy larga la espera después de un viaje de diecisiete días, estábamos machacados. Al final embarcamos a las 7,30 h con destino a nuestro país después de 2 horas de vuelo, llegamos al Aeropuerto de Barajas, recogimos el equipaje, nos despedimos del grupo, un grupo que puedo decir que ha sido de lo mejorcito de mis viajes, ha habido complicidad, buenas caras, simpatías y me arriesgo a decir mucho cariño y ¡¡¡¡ que co……. Narices,!!!! nos lo hemos pasado muy bien y hasta el próximo.

Era el día final de nuestro fascinante viaje que no olvidaré mientras viva y si puedo algún día repetir, repetiré.

Bueno sólo añadir que he podido comprobar que China es hoy día uno de los países en los que mayor contraste se puede vivir entre la tradición todavía vigente y la acusada modernidad que ansía tanto el país como su gente.

Día 16 de Abril

Día libre y …..¿en que vamos a gastar nuestro tiempo? ¿eh? En el Mercado de la Seda, ¡¡¡que bien lo pasamos!!!, para rematar el viaje. Se vino Lina con nosotros, la guía que nos ha acompañado durante todo el viaje, nos llevó al metro a todo el grupo, los ojitos rajados se nos quedaban mirando, éramos un espectáculo para ellos, llegamos a la estación correspondiente y allí nos dejó en el dichoso Mercado de la Seda y a nuestro libre albedrío…¡¡¡ Oh Dios, para volverse loco !!! y locos casi nos volvemos. Puedo decir que hicimos un alto para llevarnos algo a la boca, pues tan ensimismados estábamos con los stands que no nos acordábamos ni de comer. Después seguimos con nuestros regateos.

Bueno todavía no he dicho nada de Pekín, o Beijing, como la llaman los chinitos, es una ciudad que lleva un proceso de modernización imparable que ha iniciado hace varios años, que va camino de un país de economía capitalista, que tiene canales de agua que abastecen a la ciudad y la embellecen, así como sus jardines, especialistas éstos en jardinería. Al igual que en Shanghai, edificios altos muy modernos y acristalados contrastan con las antiguas casas de ladrillo que componen el casco antiguo de la ciudad, que son las de mayor valor social, histórico y cultural, en vías de extinción. La jornada laboral es de 8 horas, pero cuando salíamos por la noche los obreros seguían trabajando, fuese la hora que fuese, en especial la construcción. La juventud aprende rápido de los occidentales, y entran rápidamente en el modernismo, sus ropas, sus peinados su forma de vestir y hasta la forma de comer (comida rápida).
Por ser hijos únicos, son cuidados y mimados al máximo.

Pero puedo decir que aún así, aunque se vaya perdiendo el encanto de lo antiguo y entren en el progreso poco a poco, Pekín al igual que todas las ciudades de China que están en pleno desarrollo, me han encantado y merece la pena visitar este país.

Bueno sigo mi relato en cuánto al presente día, terminamos comiendo en el MacDonald’s, después continuamos con nuestras compras hasta faltarnos el aliento. Después cogimos un taxi, ¡¡¡que ya nos costó!!! hasta que uno supo llevarnos al Hotel, tan sólo por 2 euros, merecía la pena.

Quedé con la guía (Lina), cogimos un taxi que nos cobró 6 € ida y vuelta, y me llevó a casa de un chinito, aproximadamente a 20 o 30 km, pero seguíamos estando en la ciudad (a mi se me hizo una eternidad), que vendía productos naturales, le compré algunos frascos de cápsulas para los huesos, también les llevé a unos del grupo que me lo encargaron.

Cuando volvimos al Hotel, nos fuimos los tres con un matrimonio joven (Rocío y José Ignacio) a cenar a Pizza Hut, cenamos bien y lo pasamos muy divertido. Después regresamos al hotel, ya sabéis…. a dormir, ¡estábamos muy cansados! Había que madrugar mucho, partíamos para España al día siguiente, bueno a las pocas horas.

Seguimos con el viaje de China

Día 15 de Abril
Nos levantaron para no perder la costumbre, tempranito para que cunda el día, tuvimos que ir andando durante un tiempo y al final llegamos a la Gran Plaza de Tian An Men, después de las consiguientes fotos, había una gran multitud de gente, porque era fiesta para los chinitos e iban a pasar por la tumba de Mao, para verle. Hacían grandes colas, se desplazan de todas las provincias, empezamos la visita entrando a la Ciudad Prohibída, o Palacio Imperial complejo cultural y artístico más importante de China. Fue la residencia de las dinastías Ming y Ping. Fue construída por un millón de campesinos como obreros en el siglo XV por el Emperador Yong Le. Está rodeado por una muralla y un foso de 50 m. de ancho. Está compuesto por las Salas Públicas (que son las más importantes) algunos de los Museos y las zonas privadas del Emperador y sus concubinas.

Después pasamos a ver El Palacio de Verano, uno de los jardines imperiales más grandes de China y desde se puede contemplar la ciudad de Pekín, es un inmenso parque donde se llena de gente en verano, el Lago Kunming ocupa gran parte del parque, 30 km. cuadrados, es una belleza, y la gente se siente a gusto allí.

Día 14 de Abril

Nos levantaron a las 6,30 h y a las 8 partíamos hacia la muralla china, a 75 km. de la ciudad y con + de 2000 años de historia, con una longitud total de 6.350 km.¡que os voy a decir! Pues que me embargaba mucha emoción. ¡cuántas veces he pensado en la muralla! pero jamás creí que podría ser una realidad, el único monumento o maravilla, como queráis llamarla que se ve desde el Universo, pero antes nos hicieron una paradita ¡como no! A una fábrica de cloisonné, para admirar nunca mejor dicho el “trabajo de chinos”.

Bueno continuamos hacia la muralla china y….¡¡¡ allí llegamos y allí estaba yo !!!, una maravilla, se combinaba el paisaje con altas montañas, campos cultivados por los campesinos, la gente subía y bajaba, no daba crédito a lo que sus ojos estaban viendo, gente de muchos países, y de ellos mismos también, bueno la mayoría eran chinitos ¡¡¡ son tantos !!!, por lo visto estaban de vacaciones, y aprovechaban las mismas para hacer turismo por su propio país.

Ahora sí puedo decir que he estado en la Gran Muralla China, un sueño de pequeña que creí que sería inalcanzable, ¡¡ por fin lo conseguí !!

Como comprenderéis es una cosa muy turística y estaba lleno de tenderetes, donde la gente te metía las cosas por los ojos. Nos llevaron a comer allí al ladito de la muralla, a un restaurante, con bufet libre, y como siempre rodeados de chinitas mironas, para que no se nos olvide que están ahí.

Ya con la comida en la barriguita nos fuimos a visitar el monumento que tengo arriba en el encabezamiento, ¡¡si!! El Templo del Cielo, muy bonito pero a falta de restauración. A continuación y terminada la visita al Templo nos llevaron al espectáculo de la Ópera. Después fuimos a un Restaurante muy típico chino a cenar el plato tradicional, en el que pudimos degustar Pato Laqueado, el Grupo de nuestra mesa lo pasamos muy bien, las chinitas muy agradables, como siempre y nos obsequiaron con una bolsita y una demostración del baile del pañuelo. En todo el tiempo que duró la cena las chinitas, como es su costumbre, estuvieron muy pendientes de nosotros, y muy amables y simpáticas, tengo que decir que nos gustó mucho su carácter (exceptuando los que trabajan en los Aeropuertos). Un día muy completito.

Día 13 de Abril

Tuvimos la mañana libre hasta que nos trasladaron al Aeropuerto con destino a Pekín, aprovechamos para ir a hacer unas fotos a la pagoda y a una de las torres de Xian, y al mismo tiempo nos compramos unos chubasqueros, una sudadera muy guay y unas camisas, ¡para no perder el tiempo!

Salía el vuelo a las 14,30 h pero hubo un retraso de + de 1 hora, el vuelo duró 1,20 h, llegamos a Pekín y nos alojaron en el Hotel MARRIOT (Courtyard), dejamos las maletas y nos fuimos a cenar al MacDonalds, después nuestro cafetito en una cafetería muy molonga que había al lado de unos Grandes Almacenes. Cuando cerraron fue muy curioso ver salir a los empleados, todos chicos y chicas jóvenes, igualitos, cortados por el mismo patrón, parecía un regimiento, estuvieron cerca de una hora saliendo y casi casi puedo decir que iban como formados. Dimos una vuelta por unos puestecillos que había muy cerca del hotel y Mari Mar pilló un monedero de piel muy original. Llevamos las fotos a revelar y nos fuimos a dormir.

Día 12 de Abril

Como de costumbre, sin desayunar no se puede empezar el día bien, el Hotel AURUM de Xian nos puso un buen desayuno, aunque los otros no estaban mal, éste mejor. Subimos al autobús y a unos 30 km. de la capital esta el célebre Museo de Guerreros y Caballos de Terracota, de la primera dinastía Qin, ¡que puedo decir de un regimiento que todavía está por descubrir en su totalidad! Y que tiene una antigüedad de más de 6.000 años. Que las figuras son a tamaño natural, que cada guerrero pesa unos 300 kg, unos están de pié, otros a caballo y otros dispuestos para tirar con el arco, el aspecto de cada uno de ellos es diferente y que están consideradas como la octava maravilla del mundo” y yo que creí que era el Escorial ¿? Bueno tengo que añadir que me dio bastante sensación el estar allí con “ellos”, parece que te trasladas a otra época.

Después fuimos a visitar la Gran Pagoda de la Oca Salvaje, nos llevaron a ver una de las murallas de Xian, ya que la ciudad es un cuadrado y en las cuatro esquinas hay una torre, hacía un frío que pelaba, pero merecía la pena pasarlo.

Día 11 de Abril

Tomamos el desayuno del día 11 y a continuación nos llevaron a Daxu, un pueblecito de lo que es la china profunda, no creo que lo preparen a posta para ser visitado por el turista, pero si fuera así, es muy triste tener que vivir en la miseria, pero ¡¡miseria!! por unos pocos yuanes que dejan o dejamos los extranjeros, visitando sus casas y sus costumbres. Es increíble que en este siglo, todavía haya pueblos como este, parece una cloaca total, la comida, un tazón de arroz blanco cocido sin más. Casas negras, como se puede apreciar en la foto, basura y una forma de vivir que hay que verlo para saber la necesidad que pasa esta gente, unido a la no limpieza. La gente se sale a la puerta a montar bombillas (para iluminar por la noche las grandes ciudades) para ganarse algún yuan, no hay distinción de edad, hasta los viejecitos de + de 80 años Esto es Daxu, como otros tanto pueblos que existen en el mundo.

Vuelo hacia Xian, duración del vuelo 1,30 h, sin novedad, llegamos a la ciudad, moderna ciudad y con mucho encanto, fue una de las siete capitales antiguas llamada Chang’an, con una población de casi 3 millones de habitantes, con unos escaparates muy modernos y buenos comercios, fue punto de partida de La ruta de la Seda. Llegamos lloviendo al Hotel AURUM, como los demás de lujo, nos alojaron en la planta 23 y teníamos muy buenas vistas. Por la noche nos llevaron a cenar al Teatro y después a ver un espectáculo chino (opcional). Cuando salimos del Teatro nos acercamos a la plaza donde está la fuente más grande del mundo, en autobús, después ya a pié fuimos a ver la Gran Pagoda de la Oca Salvaje y una de las Murallas de Xian iluminadas, que queréis que os diga me quedé ¡extasiada!

Día 10 de Abril

Como es costumbre después de desayunar, nos llevaron camino del Puerto de Guilín, para embarcarnos en un crucero a lo largo del recorrido del Rio Li, de 88 km. entre Guilín y Yangshuo, itinerario flanqueado por montañas calizas, el paisaje impresionante, espectacular, de entre las montañas brotaban pequeñas cataratas de agua que nos acompañaban en el recorrido. Según voy en el barco, tengo tiempo para todo, para admirar tanta belleza como ya he dicho y también para pensar que estoy muy lejos de mis hijos, mis nietos, de mi familia, me entra un agobio que me falta hasta la respiración, ¡pero mejor no pensar en la distancia y disfrutar el momento! Es que ¡¡¡estoy muy lejos de mi tierra!!!

Hoy hemos batido el récord de comer muy “templano” a las 11,30 h y el que no tenga ganas, ya sabe se queda sin comer, marica el último, yo fui de las últimas. Comida china pero no se parecía en nada a la de los Restaurantes donde hemos comido, cogí de lo que más me gustaba y sobretodo “veldura”, mucha “veldura”.

Al final del crucero y después de + de 5 horas de crucero, nos desembarcaron en el pueblecito de Yangshuo, todo lleno de tiendas, esperando al extranjero como alma en pena, para poder llevar a casa algunos yuanes. Calor sofocante, nos dieron 1 hora, no podíamos descansar, si queríamos hacer algo, compramos algunas cosillas, después del típico regateo, pero estábamos derrotados por el calor, la humedad y el atosigamiento de las gentes que intentaban por todos los medios vender algo. Mari Mar compró un montón de pañuelitos del cuello, que no merecían mucho la pena, por 10 yuanes, que luego regaló al grupo, los compró con tal de quitarse al vendedor de encima. Después nos llevaron a comer en Autobús ya de regreso a Guilín, ésta preciosa ciudad de 6.000.000 millones de habitantes, clima templado, lagos, ríos, llanuras y suaves colinas componen su belleza, que hacen de ello un paisaje indescriptible, hay que vivirlo para sentir tanta naturaleza.

Aquí acusamos mucho el calor, nada parecido a la temperatura del norte de China, con mucha humedad.

A continuación, que ya era por la tarde, nos llevaron a ver unas cuevas preciosísimas, La Cueva de la Flauta de Caña, tiene un apartado al fondo que se ve New York reflejado en el agua, iluminado por la noche, muy bonito.

Cuando nos dejaron en el Hotel nos fuimos todo el grupo a que nos dieran un masaje, un matrimonio (Paco Miralles y Brígida) y Tomás y yo escogimos el masaje entero y el resto del grupo eligieron sólo el de pies. Fue una gozada, a Tomás le “sobó” una joven chinita muy linda y a mí un joven muy guapote, nos dejaron nuevos durante una hora y cinco minutos, y después nos dieron a beber el té verde , famoso en China, después se despidieron de nosotros, con una bonita reverencia. La verdad que el sitio era muy bonito y acogedor y parecía una escuela de estudiantes. Todos muy jóvenes e igualitos.

Con el cuerpo en forma nos fuimos a cenar a un restaurante que servían cena continental, cenamos bien y sobretodo muy bien atendidos por cuatro chinitas que no paraban de mirarnos, pero ninguna se quería venir a España. Después del café nos fuimos al lago a ver las pagodas iluminadas ¡¡¡que pasada!!! de ensueño, parecía el paraíso, me quedé extasiada, nos quedamos…Al fondo las pagodas iluminadas, delante el lago y un barquito paseando a la gente, el puente todo iluminado, no tengo palabras…Después de admirar tanta belleza nos dimos un paseo por la calle peatonal, compramos en los puestecillos una maleta y dos collares, Mari Mar muchos collares y una maleta. Nos fuimos a la cama.

Día 9 de Abril

Hoy nos vamos con destino a Guilín, pero como el vuelo sale a las 7,30 h tenemos la mañana libre para ir de compras. Dejamos las maletas en la puerta y después a desayunar. Nos vamos andando hacía la calle peatonal de Hangzhou, que son todo tiendas sobre todo de artesanía y según vamos, vemos un supermercado y entramos a comprar una botella de agua, cual es nuestro asombro que nos acercamos donde venden los pollos y el pescado y vemos una gallinera llena de gallinas y los peces vivitos y coleando dentro de una especie de bañera grande, nos quedamos mirando y vemos que el pollo eliges vivo el que quieres y te lo preparan en el momento, lo mismo ocurre con el pescado y otras variedades como el anguila, etc. Nosotros mirábamos con expectación y asombro y ellos nos miraban a nosotros con curiosidad. ¡Así es la vida! Bueno proseguimos nuestro camino y por fin llegamos a la calle peatonal, nos metemos en un stand que venden Swaroski, compramos unos colgantitos, pero no hay regateo posible ¡que raro!, nos hacemos unas fotos con las dependientas, y seguimos nuestro paseo, empieza a llover y salen los paraguas a las puertas de los establecimientos como moscas, compramos tres a un euro cada uno, damos una vuelta y nos vamos al hotel en taxi. El coche nuevo por fuera y viejo por dentro, pero llegamos al hotel, nos vamos a comer a las 14 h, nos tomamos un cafetito y a esperar al Autobús que nos llevará al Aeropuerto, destino Guilín, el avión sale a las 7,30 h, el vuelo duró 1,50 h, nos dieron la cena en una caja ¡muy modernos! y después un café. Había muchas turbulencias y el avión que no era tan grande como el que traíamos de París, se movía mucho, pasamos miedo, pero no tanto como la bajada que hizo el vuelo de París a Shanghai, cuando pasábamos por los Montes Urales. Llegamos a Guilín, nos trasladaron al Hotel SHERATON, era de lujo, pero le faltaba un poco de mantenimiento, la verdad era muy bonito. Nos dejaron las maletas en la puerta de nuestra habitación, como de costumbre, y después de colocar un poco, nos fuimos a cenar, y dar una vueltita, como es de suponer, no se puede perder el tiempo, cuando haces un viaje de este calibre.

Día 8 de Abril

Como habitualmente hacíamos, después de desayunar salimos en autobús hacia el Parque Hua Gang, una vez allí pudimos admirar sus hermosas flores y todos los árboles en flor, la mayoría son melocotoneros, es el símbolo de los chinos. Nos dirigimos seguidamente al barco, para dar un paseo por el Lago Oeste, pero hasta llegar al barco y andando por el Parque, Rocío, una joven del grupo, empezó a repartir caramelos a todos los niños y pasamos un rato muy divertido. Después del paseo por barco, nos llevaron a ver El Templo del Alma Escondida, donde como es su costumbre, también quemaban dinero e incienso para enviarlo a los muertos, con sus respectivas Tumbas, con imágenes de budas talladas a mano en piedra, muy grandes y la Pagoda de las seis Armonías , después de comer nos llevaron a visitar la plantación del té verde (famoso en China) y ver el proceso hasta que se llega a su degustación (es curioso), luego al hotel. Nos fuimos a cenar, hoy a Pizza Hut, y después nos dimos una vueltita por el mercadillo nocturno, ¡¡¡por supuesto que compramos!!! y también nos engañaron pero, a otra chiquita extranjera, si no es por nosotros, la hubiesen engañado mucho más. Nos dio las gracias muy agradecida. Nos fuimos a descansar, porque al día siguiente, nuestro sexto día, había que madrugar.